La guarda de vinos en la propia casa no es una tarea imposible, ni tampoco requiere grandes conocimientos. Sólo se necesitan paciencia, ingenio, ganas y tener en cuenta los siguientes tips que van a facilitar la elección y acondicionamiento de la cava hogareña:
5. Los placares de las habitaciones suelen ser buenos sitios de descanso para las botellas, ya que tienen poco movimiento y su interior es oscuro. En este caso, se debe abrir y cerrar las puertas lo menos posible y evitar guardar prendas muy perfumadas junto a los vinos.
6. Tanto dentro de los placares como en otros muebles donde se pr.etenda guardar es importante revisar el espesor de los estantes (es aconsejable que tengan entre 3 y 3,8 centímetros); y una vez comprobado esto, lo ideal es hacer un tratamiento antihongos a toda la superficie.
7. Con respecto al entorno, la temperatura y la humedad deben permanecer lo más estables posible. Por ende, las botellas nunca deben estar cerca de un aire acondicionado, estufa o calefacción.
8. Otra enemiga de los tintos y blancos es la luz tanto solar como eléctrica, por lo que no deben estar expuestos a ella directamente. En tal caso, no durarían ni dos meses en buenas condiciones por lo que hay que disponer las luminarias con sus respectivas lámparas hacia arriba para que la luz no impacte directamente sobre las botellas.